El presidente de Cuba, Fidel Castro, reiteró sus críticas a Estados Unidos por su promoción de la producción de etanol a partir de los alimentos.
En un artículo difundido aquí, Fidel Castro acogió ideas de la dirigente brasileña María Luisa Mendonza en cuanto a la necesidad de desmitificar la propaganda sobre los supuestos beneficios de los agrocombustibles.
El cultivo y procesamiento de la caña de azúcar para producir etanol contamina los suelos y las fuentes de agua potable, porque utiliza una gran cantidad de productos químicos, añadió el estadista.
Las reflexiones del líder revolucionario incluyen la transcripción de declaraciones de cortadores brasileños de caña de azúcar en un documental, lo que dijo le conducen a recuerdos de sus primeros años de vida.
Fidel Castro aseguró que la situación de miseria de los actuales trabajadores brasileños del campo le recordó cuando creció en la finca productora de caña de azúcar de Birán, a más de 700 kilómetros al este de La Habana, propiedad de su padre, un inmigrante gallego.
Aquellas tierras fueron todas entregadas al pueblo por la Revolución (1959), expuso el mandatario tras reseñar la situación de semiesclavitud a la que sometían las compañías norteamericanas a inmigrantes haitianos y de otras islas caribeñas.
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