Bajo el sugestivo título de Lecturas de verano las autoridades locales desarrollarán hoy una gran jornada del libro, proyecto que persigue ser una opción importante en el período vacacional.
La iniciativa forma parte de la política cultural del país encaminada a lograr que el cubano de hoy y el de mañana, sea una persona más culta y mejor preparada para la vida, aseguró a Prensa Latina, Lourdes Díaz, funcionaria del Instituto del Libro.
Esta fiesta del saber en la tricentenaria ciudad matancera, a 100 kilómetros al este de la Habana, se extenderá hasta bien entrada la noche y un peso importante serán las actividades literarias dirigidas al público infantil.
Además de venta de libros, se presentarán volúmenes para niños, narraciones orales, lecturas comentadas, juegos de participación, pinturas en asfalto y se proyectarán dibujos animados y filmes para los menores de la casa.
De acuerdo con el programa, funcionará una sala interactiva con navegación en internet donde se lanzarán multimedias, poetas invitados leerán sus obras, mientras artistas de la plástica expondrán sus trabajos.
La agenda se completa con descargas de trovadores, muestra de textos sobre investigaciones históricas y subasta de libros raros.
Se trata vincular a la literatura con el resto de las manifestaciones artísticas para contribuir a que desde edades tempranas se tenga gusto y motivación por la lectura y por el arte en general, expresó Díaz.
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